En el Zócalo descompuesto del letargo persistente
Mantengo el vuelo en campaña,
En orilla del entero atardecer de los grises,
Malgasto sonrisas ahogadas de menesteres,
Nos encontramos solidarios y absueltos,
De aquel endemoniado sendero
Que arrodilla
nuestras mejillas
a la buena fe del concubinato.
Muestras de una ruta agónica,
Que en las palmas
Se pierde en el sonido.