Me dejo caer en el
arcoíris monocromático,
Que ensarta exacto en
la curva de tus ojos,
Hermosa criatura,
De cabello en
garabato,
Escarbas mis
instintos,
Me tomas como roca
voluntaria,
Apretando dulce en
mis costillas,
Sádico cómplice de mi
estado,
Con el abdomen
humedecido,
Pasas tu boca desde
mi ombligo,
Y pronosticas
tormentas cerca de la nuca,
Tus dedos arrastran
mis bellos,
Y me pierdo en tu
aroma,
Sola,
Comienzo a llorar,
Y en medio del
silencio,
Tus labios me
acarician,
Postergando la
lluvia.
Que hermoso, tan profundo e inquietante
ResponderEliminar